Una limitada cantidad de colmenas garantiza la actividad de las abejas restringida al entorno de nuestra chacra biodinámica: Pasturas, frutales y la huerta las alimentan durante todo el año, logrando un producto sano, saludable alimento para toda ocasión. Nuestra miel se envasa a pocos días de extraerla de las colmenas y va perdiendo fluidez con el paso del tiempo. La miel solidificada es absolutamente natural y producto de una cristalización de su gran contenido de azúcares y su envasado a temperatura ambiente cuando todavía es fluida. Puede contener "impurezas" como cera y/o pólen ya que no la sometemos a ningún proceso de filtrado; bienvenidas sean. Ciertamente es una miel "dura", así lo quiere la naturaleza. Para "ablandarla" un poco, basta con poner el frasco en agua caliente y dejarlo sin fuego hasta que tome la temperatura ambiente. Mantener en la alacena ya que no es necesario conservarla en la heladera.